Los sanitarios gritan «¡Fuera, fuera!» a Urkullu durante su visita a un hospital

El lehendakari Iñigo Urkullu ha recibido abucheos y gritos de «¡Fuera, fuera!» del personal sanitario durante su visita de este lunes al hospital de Cruces (Vizcaya), el centro público hospitalario más grande de todo el País Vasco y con el mayor número de ingresados por coronavirus en toda la región. Los sanitarios han expresado su malestar por la falta de material de protección contra la pandemia.

Urkullu ha visitado este hospital acompañado de otros miembros de su Gobierno autonómico como Nekane Murga, su consejera de Salud, y Juan Luis Diego, el director general del Servicio Vasco de Salud vasco. Todos ellos han recibido los abucheos del personal sanitario. Otras gritos que han tenido que escuchar han sido los de «¡Más refuerzo!» y «¡Menos imagen, más calidad!».

El hospital de Cruces cuenta con 101 personas ingresadas por coronavirus, 63 de ellas en planta y las otras 38 en la UCI. Es el centro más grande de toda la región.

Los empleados de este centro llevan desde el inicio de la pandemia reclamando al Ejecutivo vasco los materiales de protección adecuados contra el COVID-19. Los sanitarios han recibido mascarillas defectuosas y escasez de Equipos de Protección Individual (EPIs) para poder atender en condiciones a los infectados por el coronavirus.

El vídeo con los abucheos a Iñigo Urkullu se ha vuelto viral en las redes sociales y varios dirigente políticos lo han compartido, como Bea Fanjul, diputada ‘popular’ por Vizcaya en el Congreso. «Parece que los sanitarios han dejado a Urkullu en la fase 0», ha afirmado la dirigente del PP en un mensaje colgado en su perfil de Twitter.

Parece que los sanitarios han dejado a Urkullu en la fase 0. pic.twitter.com/eQ21FzNs3z

— Bea Fanjul (@bea_fanjul) May 11, 2020

En el País Vasco, el coronavirus ha dejado más de 13.000 infectados y más de 1.400 fallecidos hasta el momento. Según el Ministerio de Sanidad de Salvador Illa, la pandemia lleva más de 227.000 contagiados y más de 26.000 muertos. Sin embargo, estos datos no recogen todos los miles de fallecidos por el COVID-19 notificados por los gobiernos autonómicos de Cataluña y de la Comunidad de Madrid, por lo que la cifra real de fallecidos superaría los 37.000.